El ex gobernador de Chiapas, Pablo Salazar Mendiguchía aseguró que derivado de un acuerdo político con su sucesor, Juan Sabines, fue que pudo salir de la prisión de El Amate donde estuvo recluido.
En entrevista con Noticias MVS primera emisión, el ex mandatario estatal explicó cómo se llevó a cabo el acuerdo para que pudiera salir de la cárcel donde estuvieron involucrados personajes como el actual secretario de Energía, Pedro Joaquín Coldwell que en ese tiempo era presidente del Partido Revolucionario Institucional (PRI), su hijo Pablo y un amigo personal del que no reveló su nombre.
“Mi amigo que no sabe mucho de política me dijo que tenía un mensaje del gobernador (Sabines)”, quien le comentó que le aplicarían una sentencia inferior e incluso pagarían la fianza pero a cambio tendría que inculparse de un delito menor a lo que respondió que no había condiciones para aceptar tal cosa.
Al respecto pidió que se liberara a todos sus compañeros presos injustamente y la liberación de propiedades que habían asegurado y efectivamente empiezan a salir con la condición de que firmaran un documento donde se comprometían a no demandarlo ante ningún tribunal nacional o internacional.
Salazar Mendiguchía comentó que se mencionaron varios nombres que servirían como intermediarios en el tema, tales como Baltazar Garzón o Antonio Navalón pero fueron desechados en la reunión donde se pactaría su salida de prisión estuvieron Fernando Ortiz Arana, Pedro Joaquín Coldwell, su hijo Pablo y su amigo personal.
Pese a que Coldwell iba a la reunión como testigo de hechos consumados y no para pactar ninguna condición de su salida, el gobernador Sabines convocó a varias personas que nada tenían que ver con la reunión.
El ex mandatario chiapaneco fue cuestionado en relación a las declaraciones del ex gobernador de Oaxaca, José Murat, quien aseguró que estaba involucrado en su liberación a lo que respondió que quizá hizo gestiones por su parte gracias a la relación que tiene Ortiz Arana y con Sabines pero aclaró que nada tuvo que ver con el tema.
Salazar recordó que en su estancia en el penal de Huixtla, denunció la relación de empresas constructoras que se beneficiaron en los gobiernos de Chiapas, sin embargo comentó que ahora toca a las autoridades hacer su trabajo.
Pese a que reiteró su compromiso de no demandar a su sucesor, Pablo Salazar dijo que eso no significa que sea el único agraviado, ya que en Chiapas hay 4 millones de agraviados.
“Yo no sé qué tanto se diga del gobernador Andrés Granier pero creo en el principio de presunción de inocencia y con todo y que su caso sea verdadero, es un párvulo en comparación con Sabines”, concluyó.
Fuente: Aristegui Noticias http://aristeguinoticias.com/
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